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miércoles

Consejos para iniciar una dieta Sin TACC


  • No debe iniciarse una dieta sin gluten, sin haber realizado previamente una biopsia intestinal que demuestre la intolerancia al mismo, por alteración de la mucosa.
  • La dieta debe seguirse estrictamente durante toda la vida. La ingesta de pequeñas cantidades de gluten puede producir lesión de las vellosidades intestinales, aunque no siempre estas lesiones tienen por qué ir acompañadas de síntomas clínicos.
  • Se debe eliminar de la dieta cualquier producto que lleve como ingrediente trigo, avena, cebada, centeno, y/o productos derivados de los mismos: almidón, harina, panificados, etc.
  • Se pueden consumir sin análisis previo todos los productos naturales como carnes, verduras, frutas, legumbres, huevos, hortalizas, etc.
  • Son aptas todas las primeras marcas de: arroz, azúcar, sal de mesa, mantecas, leches pasteurizadas, homogeneizadas y esterilizadas, gaseosas, vinagres, vinos, champagnes y sidras.
  • En cuanto a la CERVEZA y el WHISKY consumir solo las marcas aptas para celíacos.
  • Como norma general, deben eliminarse de la dieta todos los productos a granel (sueltos) como harinas, cereales, especias, polvos para preparar gelatinas, etc. ya que pueden contaminarse con otros productos que contengan gluten o en el caso de las harinas de maíz y de arroz, puede suceder que la molienda se haya realizado en molinos donde también muelen otros cereales como trigo o avena.

lunes

La neurogastronomía

Fuente: www.clarin.com

La memoria, la libertad, la pasión, los sentidos, la defensa de esa libertad: no, no hablamos de los atributos de una nación, hablamos de comida. Sí, de comida, y lo hacemos con un hombre cuya peripecia vital es al menos particular: Miguel Sánchez Romera es un neurólogo argentino de 57 años que se instaló en España en 1979 –“No me sentía cómodo en el país y mi instinto indicaba que tenía que cambiar mi destino”– y que desarrolló su carrera especializado en epilepsia y Alzheimer.
En Barcelona, mientras se convertía en Jefe de servicio del hospital en el que trabajaba, Romera comenzó a alimentar otra pasión: cocinar. Ya casado, se construyó en su casa de las afueras de Barcelona una cocina profesional de 30 metros cuadrados. Fue su laboratorio, el lugar en el que comenzó a fusionar sus saberes. De a poco, esa cohabitación se convirtió en algo más intenso que un hobby. “Empecé un proceso de autoaprendizaje, comenzando con las bases de las cocinas internacionales y paralelamente un estudio sistematizado de todos los productos disponibles en todo el mundo que sirven para cocinar”, explica desde Nueva York. “Después de ser capaz de hacer cualquier tipo de cocina, me dediqué a crear mis propios platos. Y ese es el momento en donde comienzo a invitar a gente a cenar. Después de dos o tres años, una pareja, experta en gastronomía y enología, me dice que debería pensar en profesionalizarme y abrir un restaurante. Decido abrir uno en las afueras de Barcelona en noviembre de 1996”.
Al tiempo que Romera se sumergía en ese fascinante mundo, la gastronomía española, de la mano de Ferrán Adriá, llegaba al Olimpo de la cocina internacional. Occidente elevaba la experiencia culinaria a la categoría de arte y la comida molecular –el gran invento de Adriá– se convertía en vanguardia. A esa cima llegó Romera.
“Mi cocina –continúa– une mis dos conocimientos en lo que es mi estilo: la Neurogastronomía, el conocimiento de las neuropercepciones sensoriales con los cinco sentidos que evocan cualquier experiencia gastrónomica”.
Los platos de Romera tienen nombres como Isis, la diosa egipcia de la Tierra, símbolo de su cocina, basada en el sabor y el respeto de los colores naturales. Isis está compuesto “por 48 cuadraditos de verduras disecadas (espinaca, patata, rabanito, remolacha, acelga,...), mini verduras (zanahoria, puerro, cebolla), cocinadas en vapor y preparadas como si fuera un guiso, más un caldo con las sobras de las primeras verduras”, explica.

¿Quién lo inspiró para cocinar?
La visión de mi madre respecto a la cocina ha sido la motivación sustancial. En el mundo del arte, sin lugar a dudas, es Van Gogh, y en el mundo de las culturas culinarias, la cocina china y la evolución de ella, que es la japonesa.
Con el tiempo, la curiosidad llevó a Romera y a su restaurante, L’Esguard, a la consagración culinaria. Su refugio gastronómico, esa pequeña pestaña que había abierto en la mitad de su vida y a 40 minutos de Barcelona, se convirtió en referencia: la guía Michelin, un dorado catálogo que selecciona, cada año, a los mejores “bodegones” del mundo, incluyó a su cocina en esa elite.
Para Romera, como ocurre con el sexo o la amistad, el acto de comer también es una experiencia sensorial. “La memoria –dice– es el vínculo entre lo que necesitamos para sobrevivir y lo que nos relaciona con el mundo de las emociones. No hay ninguna comida que no esté cargada de una emocionalidad, para lo bueno y para lo malo. Cualquier plato es el argumento de una emoción. Cada uno la dirige hacia experiencias previas y las proyecta al futuro”.

miércoles

La neuroquímica de las adicciones

El cerebro tiene sus trucos para asegurar la supervivencia y recompensarnos con dosis de placer la búsqueda de comida y sexo. ¿Cómo irrumpen las drogas en esos procesos químicos? Aquí va un diálogo sobre la abstinencia, la adolescencia y las adicciones.

Fuente: www.pagina12.com
Por Leonardo Moledo 
DIALOGO CON RICARDO PAUTASSI, INVESTIGADOR DEL CONICET, PROFESOR EN LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE CORDOBA

–Usted es licenciado en psicología, doctor en ciencias biológicas y, además de profesor, trabaja en el Instituto de Investigaciones Médicas Mercedes y Martín Ferreyra (Inimec).
–Así es.

–Bueno, cuénteme en qué trabaja. –En todo lo que tiene que ver con modelos animales de adolescencia, con ratas y roedores, y específicamente con los efectos del alcohol.

–¿Puede haber ratas alcohólicas? –No, en general no. El alcoholismo tal cual existe en los humanos es una patología que sólo existe en los humanos. Cuando se empezaron a hacer los primeros modelos con ratas, lo que se buscaba era hacer que las ratas actuaran exactamente igual que los humanos, que buscaran alcohol voluntariamente. Pero ésos fueron modelos que no servían: no se podía replicar exactamente la patología.

–Con respecto a las adicciones, hay dos aspectos. Está el aspecto químico y el psicológico, ¿no? –Esta discusión sobre la dependencia física y psíquica estaba muy presente en los ’90. La distinción entre la adicción psicológica y química se ha borrado. En este campo puntual, la dualidad químico-psicológica se ha superado.
–Yo entiendo que lo psicológico tiene bases bioquímicas. Pero lo que le pregunto es si el proceso de adicción está generado por bases bioquímicas asociadas a lo psicológico o por bases bioquímicas que no tienen nada que ver con lo psicológico. –En mi investigación me es muy difícil diferenciarlas. Porque yo sé que puedo bloquear la cadena bioquímica de adicción con un fármaco.

–Pero si la adicción es puramente química... –Es que no existe una adicción puramente química. Esa era la idea que estaba detrás de las granjas prisiones para adictos. Se suponía que después de cuarenta días de encierro y de pasada la abstinencia, la adicción estaba superada. Pero esa idea cae cuando se verifica que hay elementos psicológicos que vuelven a activar en quienes estuvieron encerrados el deseo de consumir.

–¿Cómo es el proceso de la adicción? –Lo que las teorías indican es que las drogas actúan como actúan otros reforzadores naturales, como la comida y el sexo. Actúan sobre los mismos correlatos biológicos, áreas de recompensa del cerebro que han sido preparadas por la evolución a lo largo de millones y millones de años para que cuando hagamos estas actividades sintamos placer y, por eso, busquemos este tipo de actividades. La idea general de las teorías de las adicciones es que las drogas “secuestran” estos centros biológicos sin tener mecanismos de freno. La saciedad después de comer, por ejemplo, funciona como un mecanismo de freno. En el caso de las drogas no sólo no hay mecanismos de freno sino que, por ejemplo, cuando se deja de consumir y se vuelve a consumir hay fenómenos como el desarrollo de mayor sensibilidad que llevan a un mayor consumo. Y una vez que se corta el consumo aparece la abstinencia.

martes



Dormir poco reduce gasto energía, eleva posibilidad de engordar

Salud Plena



La falta de sueño altera el día, pero también el metabolismo, lo que hace que el organismo utilice menos energía.

Este resultado, publicado en "American Journal of Clinical Nutrition", se suma a las pruebas de que la pérdida de horas de sueño promueve el aumento de peso no sólo por producir hambre, sino por hacer más lento el proceso de gasto calórico.

El estudio sugiere que dormir más horas podría prevenir el aumento de peso, según el doctor Christian Benedict, de la Universidad de Uppsala en Suecia, autor principal del estudio.

Los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos estiman que entre 50 y 70 millones de personas en el país norteamericano, incluida una gran cantidad de empleados por turnos, tienen falta de sueño crónica y trastornos del sueño

El equipo de Benedict estudió a 14 varones universitarios bajo una serie de "condiciones" de sueño (sueño reducido, nada de sueño y sueño normal) durante varios días y, luego, determinó las variaciones en la cantidad de comida que ingerían, los niveles de azúcar en sangre y de las hormonas, y la velocidad de la actividad metabólica.
Los autores observaron que hasta una sola noche de sueño perdida volvía más lento el metabolismo a la mañana siguiente y reducía entre un 5 y un 20 por ciento el gasto energético de funciones como respirar y digerir, comparado con los resultados después de una buena noche de descanso.
Después de no dormir, los participantes también tuvieron niveles matinales más altos de azúcar en sangre, de las hormonas reguladoras del apetito, como la grelina, y de las hormonas del estrés, como el cortisol. Aun así, esa pérdida de horas de sueño no provocó un aumento de la cantidad de comida que los hombres ingirieron durante el día.

Varios estudios habían determinado que las personas que duermen cinco horas o menos son más propensas a engordar y a desarrollar enfermedades asociadas, como la diabetes tipo 2. Pero eso no prueba que la falta de sueño cause el aumento de peso.

"Se desconoce si la falta de sueño provoca obesidad", dijo la doctora Carol Everson, que no participó del estudio.

Factores como el estilo de vida y la alimentación también influyen en el riesgo de engordar, agregó Everson, experta en sueño de la Facultad de Medicina de Wisconsin.

Es tentador asociar el sueño con la obesidad, pero la falta de sueño es más complicada, sostuvo el doctor Sanford Auerbach, que dirige el Centro de Trastornos del Sueño del Centro Médico de Boston. Por ejemplo, indicó, hay fármacos y otras enfermedades que alteran el sueño.

Los resultados, comentó Auerbach, deben mantenerse en su contexto. "Demuestran que nos adaptamos a la falta de sueño y que algunas de esas adaptaciones pueden, en teoría, abrir camino a la obesidad", explicó.

Por otro lado, señaló que se desconoce cómo la falta de sueño crónica influye en los niveles hormonales.

Los expertos suelen recomendar que los adultos duerman entre siete y nueve horas por noche.

jueves

Los jóvenes y sus “golosinas digitales”

Viven hiperconectados. Oyen la radio mientras estudian en un libro con la tele prendida, jugando a la play, hablando por el celular, chateando y comiendo pizza. Eligen el acceso hipertextual en lugar de la narrativa lineal. Funcionan mejor en red, aprecian la gratificación constante que los incita a desafíos crecientes”: son los “nativos digitales”, a los que el autor se dedica en este ensayo.

 Por Juan Carlos Volnovich *

Es muy probable que el operativo de instalar en el imaginario social la figura de adolescentes aislados, semiautistas, encapsulados, no sea una acción tan neutra ni tan inocente como pudiera creerse. Esos jóvenes, “nuestros jóvenes”, esos a quienes les espera una temporalidad sin futuro y una desafiliación marcada por la exclusión del trabajo y la falta de inscripción en formas estables de sociabilidad, tienen muy mala prensa y son objeto de una verdadera campaña difamatoria por parte de los medios de comunicación de masas a la que contribuyen muchas veces los “expertos”, cuando registran como conductas desviantes lo que en realidad son producciones novedosas.
Tal vez es un exceso referirnos a quienes transitan la adolescencia como una totalidad; antes bien, deberíamos reconocer la existencia de múltiples universos simbólicos. Tal vez no podamos aludir a una adolescencia cuya ética y estética su-bordine a las demás, pero eso no tiene por qué autorizarnos a hacer caso omiso de una cultura dominante, aunque esa cultura sea la de la parcialidad y la fragmentación.
Porque el caso es que nos ha tocado vivir un período trascendente en la historia de la humanidad: las innovaciones tecnológicas están impactando en la familia, en el sistema educativo, en la vida misma, como nunca antes había sucedido. O, al menos, como desde la invención de la imprenta, desde Gutenberg, no había sucedido. Y la cuestión no se clausura ahí. Quiero decir: antes que asistir a la incorporación de novedades tecnológicas, estamos atravesando significativos cambios culturales. Hemos pasado de una cultura letrada –libro, papel y lápiz– a una cultura de la imagen que, a su vez, rápidamente, le dejó lugar a la cibercultura (Alejandro Piscitelli, Nativos digitales: dieta cognitiva, inteligencia colectiva y arquitectura de participación, ed. Aula XXI). Entonces, se trata de la cibercultura y de los sujetos que la protagonizan. Nosotros, los “inmigrantes digitales”, “expertos” en adolescentes, aún no hemos desarrollado los instrumentos teóricos ni las herramientas epistemológicas con las que podamos teorizar acerca de los procesos y las operaciones lógicas desplegadas por los “nativos digitales”.
Hoy en día, los adolescentes se definen más como usuarios y como autores que como aprendices. Se caracterizan por las operaciones que pueden llegar a hacer con el flujo de información que reciben, más bien que por el sentido que les encuentran a los textos que se les ofrecen. Transformados en autores, las pibas y los pibes no interpretan textos, no leen ni descifran, no incorporan algo que en el futuro puede llegar a servirles; sólo operan, generan estrategias operativas –muchas veces extremadamente barrocas y complejas– para que la marea de información se les vuelva habitable.
Con el éxito editorial de Harry Potter, ante la avalancha de bestsellers para niños, con la familiaridad del chat y de los mensajes de texto por los celulares, con la popularidad de Facebook o de Twitter, quienes pensaban que la lectoescritura estaba agotada y había cumplido su ciclo en la historia de la humanidad volvieron a respirar. Claro que el nuevo género literario de mensajes usados por los pibes rápidamente transformó los suspiros de alivio en gritos espantados ante la perversión de la lengua pero aun así, es inevitable aceptar que, al menos, leen y producen textos. Escriben y... leen. Pasan el día, y muchas veces las noches, leyendo y escribiendo.

martes


Adicciones: hallan una pieza clave


Adicciones: hallan una pieza clave
Marcelo Rubinstein, en su laboratorio.  / MIGUEL ACEVEDO RIU
Nora Bar
LA NACION
Aunque lo hagamos de forma totalmente inconsciente, para que nuestras neuronas dialoguen entre sí es necesario que se produzca un intercambio químico: la liberación de neurotransmisores, como la dopamina.
Esta molécula interviene en la detección y anticipación de estímulos placenteros y en las adicciones, y es producida por un grupo de neuronas cuyo desequilibrio puede determinar la aparición de trastornos como la esquizofrenia, el déficit de atención y el mal de Parkinson.
"La dopamina es fundamental para que podamos movernos y organicemos nuestras acciones en el espacio y el tiempo", explica el doctor Marcelo Rubinstein, investigador del Instituto de Genética y Biología Molecular (Ingebi), del Conicet, y profesor de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA.
Precisamente, en un trabajo que se publica en la última edición de Nature Neuroscience , un grupo liderado por Rubinstein e integrado por Estefanía Bello y Diego Gelman, además de colegas norteamericanos, acaba de mostrar por primera vez in vivo cómo funciona un engranaje clave para la automodulación de las neuronas dopaminérgicas.
"Descubrimos cómo actúa un receptor muy particular cuya existencia se conocía in vitro -cuenta Rubinstein-. Y lo hicimos creando algo que nos pone muy orgullosos: el primer y único ratón mutante del país, para lo cual tuvimos que aplicar una técnica que permite introducir modificaciones en cualquier gen y que muy pocos países periféricos dominan."
En efecto, el trabajo es una detallada disección de los engranajes que intervienen en la liberación y posterior recaptación de este neurotransmisor.
"La dopamina es lo que más nos diferencia de las plantas -dice Rubinstein-. Estas obtienen su energía del sol, entonces no tienen que moverse. Los animales tenemos que salir a buscar nuestro alimento y por eso los sistemas nerviosos fueron evolucionando para poder planificar la organización espaciotemporal de forma más eficiente a partir de claves contextuales que nos permiten decidir cuándo hay altas probabilidades de que ocurra un evento beneficioso y cuándo no. Nos permite detectar y predecir estímulos placenteros o recompensas, como el alimento."
Recompensa y anticipación
Experimentos en monos ya habían mostrado que las neuronas productoras de dopamina se activan inmediatamente después de una actividad placentera o de recibir una recompensa. Al hacerlo, liberan el neurotransmisor, que llega a los receptores de las neuronas postsinápticas.
"Estas neuronas están vinculadas con la sensación de placer -explica Rubinstein-. Pero tienen un comportamiento singular. En monos, si uno emite un tono un segundo antes de darles jugo de manzana, que les gusta, su activación se adelanta. Es algo similar a lo que ocurre cuando el referí marca un penal: como los hinchas saben que la posibilidad de que se transforme en gol es del 80%, descuentan que se va a producir y lo festejan. Es un sistema predictivo que se basa en claves contextuales y que, como sucede con la publicidad, nos abre expectativas. Ahora, si suena el tono y la recompensa no llega, hay una depresión de dopamina. Quiere decir que se trata de un sistema que no solamente predice, sino que puede producir una sensación de frustración."
Los problemas aparecen cuando hay desequilibrios. Es sabido que el exceso de dopamina puede producir una cantidad de alteraciones de la conducta o de las sensaciones. Es decir que resulta imprescindible que haya en todo momento una cantidad adecuada de dopamina en el espacio sináptico. Y esto la neurona lo logra recaptando rápidamente la dopamina que libera a través de una "compuerta" llamada "transportador de la dopamina" (que permite que ésta entre, pero no salga) o inhibiendo su producción.
"El transportador de la dopamina es el blanco de la cocaína: lo bloquea y eso hace que haya mucha cantidad libre -dice Rubinstein-. Pero cada neurona puede modular la síntesis de dopamina a través de un «freno» que activa tres mecanismos. Este detecta la cantidad de neurotransmisor que hay en el espacio sináptico y da la señal de alerta."
Para estudiar la acción de esta pieza de la relojería neuronal, Rubinstein y su equipo crearon ratones mutantes que no la tienen.
Así, los científicos pudieron constatar que en ellos está aumentada un 100% la síntesis de dopamina. Esto se traduce en que son hiperlocomotores (se mueven un 30% más), se muestran mucho más inclinados a iniciar actividades que los normales (un 100% más) y tienen aumentada su sensibilidad a la cocaína.
"Registran acondicionamiento a la droga con dosis 10 veces menores", dice Rubinstein. La respuesta a la comida también se ve alterada, ya que manifiestan comportamientos que podrían interpretarse como compulsivos: "Un ratón normal aprieta 256 veces el pedal que le proporciona pequeños pellets de alimento; los modificados, 1024".
Según el científico, aunque no saben si estos animales son "adictos", experimentos actualmente en marcha (pero todavía sin publicar) sugieren que sí.
"El descubrimiento de los autorreceptores neuronales es lo que podríamos llamar un «invento argentino» -cuenta-. En la década del setenta, María Emilia Enero, Salomón Langer, Rodolfo Rothlin, Francisco Estefani y Edda Adler, del Instituto de Investigaciones Farmacológicas, los describieron in vitro en el sistema nervioso periférico, les pusieron el nombre de «autorreceptores» y se dieron cuenta de que la misma neurona que libera también «sensa» el neurotransmisor, lo que le permite ajustar futuras liberaciones. Ellos rompieron con el dogma de que la neurotransmisión era unidireccional. Nuestro trabajo nos permite avanzar más allá."
De aquí en más, sugiere Rubinstein, el conocimiento de estos complejos engranajes bioquímicos podría ofrecer claves vitales para el tratamiento de las adicciones y otras enfermedades del sistema nervioso.

sábado

Espirulina
Valor Nutricional y Terapéutico
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El alga espirulina es comercializada internacionalmente como suplemento dietético de calidad excepcional, y no como medicamento, aunque numerosos estudios señalan su valor terapéutico.
En su composición tiene un alto porcentaje de proteína (65 a 70%), todos los aminoácidos esenciales y nueve no esenciales; minerales como potasio, calcio, zinc, magnesio, manganeso, selenio, hierro y fósforo; todas las vitaminas del complejo B, vitamina E, etc.
También contiene azúcares complejos naturales, carotenoides, enzimas y solo 7% de grasas, en forma de ácidos grasos esenciales. Muchos la consideran como una alternativa de alimentación en el futuro, sobre todo para países del tercer mundo.
Por: Amelia Galdo Fernández
Después del regreso de Cortés a España, López de Gomara, escribió La conquista de México a partir de los documentos del conquistador, y quizás bajo sus instrucciones o dictados. Refiere que los pobladores aztecas consumían como alimento cierta sustancia azul verdosa que llamaba tecuitlatl, "un tipo de tierra; pues con la ayuda de redes de malla muy menuda, abarren, en cierto tiempo del año, una el cosa molida que se cría sobre el agua de las lagunas de Méjico, y se cuaja, y que ni es yerba, ni tierra, sino como cieno. Hay dello mucho; y en eras, como quién hace sal, la vacían, y ahí se cuaja y se seca. Hócenlo tortas como ladrillos, y no solo las venden en el mercado, más llévanlas también a otros fuera de la ciudad y lejos".
Reportes más contemporáneos señalan que los kanembous, habitantes de Kanem, al norte de Chad (África), cosechan de sus lagos un alga, que luego preparan como alimento (70% de su dieta): el dihé, que recuerda al tecuitlatl. Ambas son preparaciones alimenticias de alto contenido proteico, cuyo componente esencial es la espirulina.


La espirulina y su composición
La espirulina es un alga fotosintética pluricelular, minúscula, de color verde azulosa (Cianophyceae), de apenas medio milímetro de longitud. Habita el planeta desde hace tres mil millones de años. Crece y se multiplica en las aguas saladas y muy alcalinas de ciertos lagos en África, en Asia subtropical y tropical, y en América. Después de su aislamiento por Turpin en 1827 de un arroyo de agua fresca, se han encontrado diferentes especies, en ambientes como tierra, arena, agua de mar y agua dulce. La palabra en Latín spirulina significa espiral pequeña, referida a la forma de su estructura. Debe el color verde a la clorofila, y el azul a la ficocianina.
En su composición hay un alto porcentaje de proteína (65 a 70%), todos los aminoácidos esenciales y nueve no esenciales, en perfecto balance; minerales como potasio, calcio, zinc, magnesio, manganeso, selenio, hierro y fósforo; vitaminas como piridoxina (B6), biotina, ácido pantoténico, ácido fólico, inositol, niacina o ácido nicotínico, riboflavina (B2), tiamina (B1), tocoferol (E). cianocobalamina (B12). También contiene azúcares complejos naturales, carotenoides, enzimas y 7% de grasas en forma de ácidos grasos esenciales.


Acción nutricional y terapéutica
El aporte proteico de la espirulina es muy superior al de otras fuentes tradicionales (pescado, 10%; soya, 30-35%; leche, 3%; maní, 25%; huevos, 12%; granos, 8%; carne, 20-22%). Como carece de celulosa dura en la pared celular, proporciona mejor digestibilidad de la proteína (95%), por lo que favorece a los individuos con mala absorción intestinal.
Los ácidos grasos esenciales se encuentran en proporción mayoritaria dentro de los lípidos constituyentes. En particular, el ácido ?-linolénico es precursor de las prostaglandinas (PGE), y en algunas investigaciones se ha encontrado una disminución de este ácido graso y la PGE en enfermedades degenerativas. Se ha podido comprobar también un efecto beneficioso del ácido ?-linolénico en las artritis, la obesidad, el alcoholismo, enfermedades neurosiquiátricas y en estados inflamatorios.
Como otras algas, absorbe y forma complejos orgánicos naturales con oligoelementos muy importantes, los que son fácilmente asimilados por el organismo. Los minerales inorgánicos son necesarios para la reconstrucción estructural de los tejidos corporales, y participan en procesos como la acción de los sistemas enzimáticos, la contracción muscular, las reacciones nerviosas y la coagulación de la sangre.
El selenio, el cinc y el cobre, por ejemplo, forman parte de funciones bioquímicas importantes en la preservación de la estructura y función de los tejidos en el sistema nervioso central, además de poseer una marcada acción antioxidante. De hierro —elemento esencial para la producción normal de hemoglobina— tiene unas veinte veces mayor contenido que los alimentos comunes más ricos. Estudios acerca de la biodisponibilidad de hierro presente en el alga plantean que es absorbido en un 60% más que el presente en las tabletas de sulfato ferroso. Una ventaja de la espirulina sobre otras algas es su bajo contenido de yodo y sodio, lo que hace que mayor número de personas puedan consumirla.
Es uno de los alimentos más ricos en betacarotenos (Provit.A), constituyente que, junto con la vitamina E, protege a las células contra deterioro causado por los radicales libres (antioxidante). La vitamina A es esencial para las células epiteliales y para un crecimiento normal.
En general, la vitamina E se absorbe limitadamente, por lo que su déficit en el organismo es frecuente. Se conoce que esta vitamina es esencial para proteger la integridad y estabilidad de la membrana axonal. Las vitaminas del importante complejo B tienen funciones estrechamente relacionadas, por lo que el déficit de cualquiera de ellas afecta el metabolismo de las otras. Excepto la niacina, sintetizada a partir del triptófano en el organismo humano, estas vitaminas deben obtenerse de fuentes exógenas (vegetales, carnes) o a partir de los microorganismos de la flora intestinal, como es el caso de la B12. La B1 —factor más importante en el metabolismo del sistema nervioso central— no solo es aportada directamente por la espirulina, sino que su absorción se hace más eficiente por el incremento que produce de los lactobacilos.
El ácido fólico y la vitamina B12 (cianocobalamina) son vitaminas con funciones cooperadas en la síntesis de nucleótidos purínicos y pirimidínicos, y en la obtención de metionina. El déficit de ácido fólico y B12 tiene su causa más común en una alimentación insuficiente, pudiendo aparecer desórdenes polineuropáticos y neurosiquiátricos. Los requerimientos de vitamina B12 diarios se alcanzan con solo ingerir 3 g de espirulina, sin necesidad de adicionar ningún otro producto de origen natural.
Contiene los ocho aminoácidos esenciales, es decir, aquellos que deben ser tomados en los alimentos, pues el organismo humano no puede sintetizarlos.
La síntesis de las proteínas humanas los requiere en su conjunto, y son necesarias para favorecer el crecimiento y mantener la salud. La abundante cantidad de metionina presente posibilita la formación de colina, precursor de la mielina, y junto a la cisteína constituyen la fuente de azufre para la conversión del cianuro en tiocianato, por lo que juega una función de destoxificación en relación con el cianuro.
Su contenido de fenilalanina justifica su empleo en dietas de adelgazamiento. Este aminoácido actúa como supresor natural del apetito, pues produce una sustancia conocida como colecistokinina, la que actúa rápidamente sobre el hipotálamo, centro que controla la sensación de apetito.
La ficocianina —presente en altas concentraciones en esta alga— ejerce efectos antioxidantes y antinflamatorios demostrados.
La espirulina es comercializada internacionalmente como suplemento nutricional o dietético de calidad excepcional, y no como medicamento, aunque numerosos estudios señalan su valor terapéutico.

Investigaciones y Estudios: los mejores Resultados
Investigaciones realizadas desde la década del 1980 indican que produce buenos resultados cuando se emplea como suplemento dietético en pacientes con afecciones intestinales o renales, diabetes mellitus, acné, enfermedades cardiovasculares, cáncer o sida. El consumo de vitaminas y minerales en esta fuente natural es ventajoso con respecto a sus análogos sintéticos, ya que se encuentran enlazados a complejos de proteínas, hidratos de carbono, lípidos y quelatos, que en su conjunto son fácilmente asimilables por el organismo.
Reportes científicos señalan efectos beneficiosos de la espirulina en el tratamiento de algunas enfermedades que presentan desórdenes neuropáticos asociados, como la diabetes, algunos tipos de tumores y anemias, bien sea por el control de los niveles de azúcar en sangre, por su efecto antioxidante o por el aporte de grandes cantidades de hierro, ácido fólico y vitamina B12, respectivamente. También posee actividad antiviral contra varios virus patógenos, atribuida en parte a su contenido en sulfoglicolípidos, lo que puede estar relacionado con su capacidad para aumentar la respuesta inmune y estimular la función de los macrófagos.
Estudios recientes reportan la posibilidad que tiene de fortalecer el sistema inmunitario. La presencia de alto contenido en ácidos grasos polinsaturados y su acción hipocolesterolémica constituyen, sin duda, ventajas adicionales en la preservación de la salud. Por último, favorece la función renal al eliminar sustancias tóxicas del organismo y reduce los efectos colaterales de algunos fármacos. Al parecer, los efectos beneficiosos de la espirulina radican en la acción sinérgica de sus componentes, los que no presentan efectos secundarios ni crean dependencia.


Suplemento Nutricional
Como suplemento nutricional se recomienda tomar de 2-3 tabletas o cápsulas (de 400 mg) con las comidas. En forma de polvo, una cucharada sopera, que se puede añadir a una onza de jugo de frutas para hacer más agradable su sabor. Como coadyuvante en dietas de adelgazamiento se recomiendan de 6-9 tabletas al día (0,5-1 hora antes de las comidas).
Gracias a la calidad nutricional del tecuitlatl, hoy se reconoce que este jugó un rol muy importante para asegurar una alimentación suficiente, correcta y equilibrada en el pueblo azteca, asentado con una agricultura primitiva y con poca diversidad alimenticia.
Conocedores de la riqueza de la espirulina fomentan actualmente su cultivo experimental e intensivo en diferentes latitudes. En cultivo, los rendimientos promedio por hectárea son del orden de 15 a 20 t secas/año, o sea, de 9 a 12 t/ha/año en proteínas, aunque se manifiestan valores muchas veces superiores (1 ha de maíz produce aproximadamente, tan solo, 400 kg). Este organismo vegetal se ha convertido en un blanco de la dietética. Investigaciones con resultados muy interesantes y optimistas han mostrado que es posible tratar y mejorar los estados de malnutrición proteíno-energética en niños utilizando la espirulina. Muchos la consideran como una alternativa de alimentación en el futuro, sobre todo para países del tercer mundo.


¿Sabía usted que...?
Los mensajeros aztecas, cuya gran resistencia les permitía correr durante días y días, llevaban como alimento las tortas de alga espirulina.
También nuestro recordista mundial de salto alto Javier Sotomayor, y el campeón olímpico Lee Evans, dos veces medalla de oro y poseedor de cuatro marcas mundiales en campo y pista, han reconocido el consumo de la espirulina como suplemento nutricional.
En general las algas constituyen valiosos complementos de la nutrición. Japón es el país donde más algas se consumen por habitante, y el que más las produce y exporta. 


Tal vez esa es la razón por la que la mayoría de las especies comercializadas poseen nombres de origen japonés: 
Nori. Algas rojas o púrpuras, típicas para la elaboración de sushi. De color negruzco al secarse y verdes tras la cocción. Suelen venderse en forma de hojas finas y secas, similares al papel.
Kombu. Son utilizadas para preparar un caldo denominado dashi. Su aporte de calcio, hierro, potasio y yodo es notable.
Hijiki. Algas muy populares en la cocina nipona. Sus minúsculas ramitas, cuando se ponen a remojo, se asemejan a los fideos negros.
Arame. Similar al anterior, aunque más dulce y menos crujiente. De color pardo amarillento si están crudas, y negruzcas de estar cocidas.

jueves

Carbonada light


Carbonada

Ingredientes para 8 porciones:
  • 1 kilo de carne vacuna magra (puede ser paleta, cuadrada o nalga)
  • 1 cebolla criolla
  • 1 cebolla morada
  • 1 cebolla de verdeo
  • 1 morrón rojo
  • 4 tomates perita
  • 2 choclos
  • 2 batatas
  • 1 papa chica
  • 1 zapallo anco
  • 5 mitades de durazno en lata sin azúcar
  • 1 litro de caldo (puede usarse un sobrecito de caldo diet y disolver en un litro de agua caliente)
  • Sal, pimienta.
Preparación: En una olla grande saltear con rocío vegetal la cebolla criolla, la cebolla morada, la cebolla de verdeo y el morrón picados finamente. 
Una vez que la cebolla esté transparente agregar la carne vacuna cortada en cubos. Incorporar el caldo y agregar el resto de las hortalizas cortadas en cubos de 2 cm de diámetro, cocinar a fuego medio durante aproximadamente 40 minutos, incorporar los duraznos cortados también en cubos y dejar cocinar por 5 minutos más.



Guiso de lentejas
Ingredientes:
  • 2 tazas de lentejas cocidas
  • 1/2 ají morrón picado
  • 1/3 de lata de tomate triturado
  • 1 cebolla grande picada
  • 2 zanahorias grandes
  • 1 papa mediana
  • 500gs Carne magra (Paleta, cuadril,nalga)
  • 1/2 taza de caldo diet
  • sal, pimienta, laurel, rocío vegetal

Preparación:
Rehogar cebolla y ají en una cacerola con el rocío vegetal. 
Aparte cortar la carne en cubos pequeños y dorarlos en sartén con rocío vegetal. Agregarlos a la preparación de las cebollas y ají.
Luego añadir el tomate, la zanahoria y la papa cortada en daditos, y condimentos.
Cocinar tapado por 25 min. aprox., añadiendo caldo para que no se seque la preparación.
Antes de terminar la cocción agregar las lentejas.

lunes

Como evitar la acidez

Fuente: www.clarin.com
Por Mariana Israel
 
La primera medida para combatirla es adoptar nuevos hábitos alimenticios.
Si uno de cada cuatro adultos sufre acidez, es probable que usted haya padecido alguna vez ese fuego que quema el pecho o la boca del estómago, o ese gusto ácido en la boca. Detrás de estos síntomas suele esconderse el reflujo gastroesofágico que, según Luis Soifer, jefe de Gastroenterología del CEMIC, se produce cuando el ácido clorhídrico del estómago sube hacia el esófago, por donde baja la comida desde la boca. “Falla la válvula cardias que une el esófago y el estómago, que normalmente se abre para que pasen los alimentos y luego se cierra”, explica. Cuando el cardias se relaja y deja escapar el ácido, “como las paredes del esófago son sensibles a esta sustancia aparecen los síntomas”, enuncian los gastroenterólogos Fabio Nachman y Claudio Bilder de la Fundación Favaloro.
La alimentación ocupa un rol clave. Según la licenciada Alejandra Delfante, del Servicio de Alimentación del Hospital Italiano, “la acidez es más frecuente tras comidas abundantes o grasosas. Además, hay alimentos y bebidas que motivan la relajación de la válvula, lo cual favorece el reflujo”.
Nachman enfatiza que éste es un fenómeno normal; sin embargo, él y su par en el CEMIC recomiendan consultar al médico si los síntomas ocurren más de una vez por semana, si aumenta su intensidad, si suceden de madrugada y si están acompañados por tos crónica, asma, anemia, pérdida de peso, laringitis crónica, erosiones en los dientes o hemorragias.
Existen estudios para saber qué dispara la acidez y si el esófago o el estómago están dañados. Uno de ellos es la ph metría esofágica. Bilder detalla que se coloca en el esófago un sensor de ácido que registra datos del paciente durante 24 horas. Luego, se relacionan los resultados con las comidas, los síntomas y la actividad de la persona.
Para combatir el reflujo alcanza, a veces, con adoptar nuevos hábitos alimenticios; el segundo paso serán fármacos que bloquean y disminuyen la producción de ácido. “Con medicamentos y dietas se obtiene una respuesta favorable en la vasta mayoría de pacientes”, asegura Nachman. Para quien no responde a los tratamientos o se niega a tomar medicación de por vida, existe la cirugía antirreflujo por laparoscopía, que consiste en reconstruir la válvula esofágica. “No hay un tratamiento ideal, cada uno deberá recibir el mejor posible para evitar los síntomas y las complicaciones, con los menores efectos colaterales y el costo más razonable”, concluye Soifer.

Cómo aliviar los síntomas
Algunas pautas:
  • Esperar dos horas después de comer para acostarse.
  • Elevar la cabecera de la cama con un taco de 10 centímetros.
  • Evitar el sobrepeso y el tabaquismo.
  • Comer en un ambiente tranquilo y masticar bien.
  • Respetar las cuatro comidas en un horario regular e incorporar colaciones.
  • Optar por lo hervido o cocido a la plancha.
  • Para condimentar: perejil, orégano, albahaca y laurel.  
  • No usar ropa ajustada.

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